El municipio de Benidorm, en Alicante, no solo destaca por sus largas playas de arena y su apacible clima, sino también por ser la tercera ciudad europea con una mayor concentración de rascacielos, superada tan solo por Londres y Milán. Entre sus altísimas construcciones encontramos el edificio Delfín Tower, un rascacielos residencial de más de 95 metros de altura compuesto por 23 plantas.
Delfín Tower cuenta con apartamentos de lujo en primera línea de mar
Las viviendas que conforman el edificio Delfín Tower no son aptas para todos los bolsillos, ya que el rascacielos se compone de apartamentos de lujo que combinan diseño e innovación y cuentan con un emplazamiento privilegiado en primera línea de playa.
La sostenibilidad también se ha tenido muy en cuenta en la construcción de Delfín Tower. De hecho, el inmueble se ha convertido en la primera y única torre residencial de Benidorm en disponer de la certificación Leed Gold, toda una muestra de los altos estándares de sostenibilidad en cuanto a eficiencia energética e hídrica y calidad del aire interior.
Es precisamente en este rascacielos alicantino donde se ha producido la venta del piso más caro de la historia de Benidorm: un apartamento de 2,8 millones de euros que está situado en la decimoquinta planta del edificio y que cuenta con una superficie de 380 m², cuatro habitaciones y cuatro cuartos de baño.
Viviendas que ofrecen la máxima intimidad
La fachada del edificio Delfín Tower sorprende por su doble curvatura, que ofrece un diseño único y permite que cada planta sea distinta y única. Además, la original arquitectura del rascacielos hace posible que los propietarios puedan contemplar unas imponentes vistas al mar sin tener en ningún caso contacto visual con el jardín o la piscina, lo que garantiza la máxima privacidad, algo que brilla por su ausencia en la gran mayoría de inmuebles que se distribuyen a lo largo y ancho de la ciudad alicantina.
Los interiores de los apartamentos de Delfín Tower también sorprenden por sus techos, que tienen una altura muy superior a la media con la finalidad de potenciar la sensación de amplitud y luminosidad de todas las estancias.
Sin duda, el lujo es el gran protagonista de los apartamentos que conforman el edificio Delfín Tower y este no solo invade el interior de las viviendas, sino también las áreas comunes.
Y es que el rascacielos dispone de una piscina infinita de 350 m² que se funde con el mar y proporciona una perspectiva única del Mediterráneo. A ella se suman un gimnasio, un club social, una piscina climatizada ideal para los meses más fríos del año, una pista de pádel y varias zonas ajardinadas.
A todo ello hay que añadir otras prestaciones de lujo donde encontramos mobiliario a medida de la marca Schüller, electrodomésticos Neff y un sistema de domótica que permite controlar la temperatura, las persianas y la humedad.
A pesar de que el apartamento más económico de Delfín Tower ronda el millón de euros, en estos momentos solo quedan un total de seis pisos a la venta.
Deja un comentario
